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lunes, 2 de febrero de 2015

"10 AÑOS no son nada... son todo" El Embarazo (Capítulo XIII)


Los siguientes 3 meses, personalmente es la etapa que más me gusta del embarazo. Aquí las mujeres lucen radiantes, se ven hermosas y llenas (literalmente) de vida. El embarazo es evidente, ya no se puede ocultar, la ropa las hace verse más bonitas y ya pasaron los fastidiosos mareos.

Aquí es también cuando la pareja tiene la opción de conocer el sexo del bebé y a la par,  pensar en el nombre que tendrá el nuevo miembro de la familia. Aquí un mar de posibilidades está presente. La elección del nombre, te recomiendo que sea un acuerdo de ambos y no una lucha de poderes.

El:       -  Si es niño, le ponemos como yo, y si es niña le ponemos como tú.
Ella:    - Ay no, si es niña le ponemos como mi mamá.
El:       - No, mejor como la mía.
Ella:    - Bueno está bien como la de ambos.
El:       - No qué te pasa, un solo nombre, ¿Para qué le ponemos dos?
Ella:    - ¿Y por qué nomás uno, que sean dos y bien sonoros.
El:       - Me gustan los nombres con carácter, pero sólo uno.
Ella:    - A mí los nombres con bonito significado, por cierto hay una página en internet…
El:       - ¿Y si le ponemos el nombre del día que nazca?
Ella:    - O sea que le pongamos ¿Domingo? ¿o qué?
El:       - Quiero decir, ponerle el nombre del Santo que traiga el día.
Ella:    - No, hay unos nombres bien raros…
El:                   - Bueno, si es hombre, se llamará como yo, y si es mujer qué te parece si le ponemos Mónica, es un bonito nombre.
Ella:    - ¡Bah!, ¿y por qué Mónica? ¿Quién es Mónica?
El:       - Nadie, nada más me gusta el nombre…
Ella:    - Si, seguramente…. de seguro así se llamaba una de tus novias.
El:       - Te juro que no.
Ella:    - A ver ¿Qué tal si le ponemos Carlos?.... ¿A  ver?...  también es bonito nombre.
El:       - ¿Cual Carlos?… Nunca me dijiste que tuviste un novio que se llamara Carlos.
Ella:    - No tuve ninguno…
El:       - No mientas…
Ella:    - ¿Y si le ponemos “Masiosare”? como el extraño enemigo…
El:       - Que chistosita, no me cambies el tema...

Como puedes ver, querido Pablo, ponerle nombre a un hijo es algo que puede ser simple, pero también muy, pero muy complejo.

Ahora, comentemos algunos detalles sobre los últimos 3 meses del embarazo, esta etapa vuelve a ser muy pesada para la mujer, aquí el peso del bebe y el tamaño del vientre cada vez mayor va haciendo las cosas cada vez más difíciles. Les resulta cansado estar mucho tiempo en la misma postura ya sea paradas, sentadas e incluso acostadas. No se pueden poner los calcetines, ni cortarse las uñas de los pies por sí solas. Ni pensar en cargar cosa muy pesadas, subir muchas escaleras, estar en una aglomeración o incluso manejar.  El cansancio se va a cumulando e incrementando conforme pasan los días, además aparece una nueva variable, la tensión de saber que se acerca el momento del parto.

Aquí también puede ser que las piernas, los pies, incluso la cara de las señoras se comiencen a hinchar. Aquella figura de la mujer jovial del quinto y sexto mes, se irá tornando en la de una mujer que poco a poco ya no puede más. Querido hijo, este nuevamente es tu momento. No sabes cuánto bien le hace a una mujer sentir que no está sola en esto.  No sabes el miedo que sienten de saber que están a punto del gran momento y no sabes cuán satisfactorio resulta para ellas tener un hombre a su lado que las ame más que nunca.


Aunque ya quedamos que la mujer lleva la parte más difícil, no hay que menospreciar la labor del padre, ya que no será poca la energía que requiera para seguir haciendo su trabajo y mucho del que antes hacía la señora. Su nueva condición hace que uno se deba tornar más acomedido y comprensivo que de costumbre. No será raro que la mujer requiera ayuda incluso para vestirse, ya no digamos con las faenas del hogar. Aunque también es común (y más en estos tiempos) encontrar algunas mujeres verdaderamente intrépidas que se sienten totalmente autosuficientes y con ganas de irse manejando hasta el hospital todavía el día del parto.  Señoras, déjense ayudar.  Nadie las va a juzgar de inútiles si piden algo de ayuda, además muchas personas (y no se diga su marido) estarán encantados de brindar apoyo hasta en las tareas más simples. Guárdense ese: “Pero si yo todavía puedo”, “Me siento bien”, (y nadie lo duda, pero es un riesgo grande el que corren muchas veces innecesariamente). Además, no se preocupen, ya vendrá el tiempo de demostrar lo fuertes que son. 

"10 AÑOS no son nada... son todo" El Embarazo (Capítulo XI)

Querido Pablo, en este capítulo te voy a contar cosas que te van a resultar difíciles de comprender mientras no lo vivas. Un embarazo hay que vivirlo. 
Tu mamá me citó en un lindo restaurante italiano para darme la noticia. Con el tiempo me confesó que no sabía cómo hacerlo, así que se limitó a extraer de su bolsa la impresión de una ecografía en la que aparecía una minúscula mancha blanca. 

-¿y eso qué es?
- Pues… adivina….

Me quedé observando la impresión de lo que parecía una mala fotografía de cámara polaroid, tratando de entender lo que me trataba de decir, hasta que finalmente la idea cayó en mi mente como piedra en el agua - ¡No mames! – fue lo único que pude exclamar. 

- ¡Que poco romántico!, ¿cómo me dices eso? – me reclamó con los ojos llenos de lágrimas.
- ¿O sea que vamos a ser papás?...

Sobra decir que me puse de pie y nos dimos un gran abrazo. No pude quitar la sonrisa de mi boca en toda la tarde. A partir de ahí, no hemos dejado de hacer planes.

Los 3 primeros meses del embarazo son un coctel de emociones cada día. Cuesta trabajo hacerte a la idea de que existe alguien adentro de ella. Es natural que por momentos te embargue el miedo pues se trata de una situación nueva para la pareja y como tal hay dudas acerca de todo. 

¿Qué debo comer?, ¿Qué debo hacer?, ¿Qué debo evitar?, la realidad es que la percepción de la vida comienza a cambiar a partir de ese momento y son tantos los temas que llegan a tu mente, que no sabes ni por donde comenzar. 

Como este texto lo estoy escribiendo para ti, querido Pablo, me centraré en hacerte algunas recomendaciones para que vivas esta etapa lo más tranquilo y en paz posible, pero disfrutándola al cien por ciento.

Mi principal recomendación es la siguiente: No te preocupes por el bebé, del bebé se va a encargar ella, tú preocúpate por tu pareja. Sin duda alguna y aunque el embarazo es una cuestión de dos, la parte más difícil la lleva la mujer. Así que mantente atento a ver por ella y estar atento a sus necesidades. 

Actualmente hay muchísima información sobre métodos de concepción, embarazo, parto, etapa de lactancia y demás temas relacionados con esta etapa de la vida, bueno pues no se te ocurra decir, insinuar, ni mucho menos actuar de tal forma, que haga parecer que dichos temas no son de tu interés. Tu pareja estará ávida de saber acerca de esos temas y será un apoyo muy grande para ella que tú también te intereses en conocer cada una de las etapas por las que su cuerpo va a pasar, así como el proceso de desarrollo del nuevo miembro de la familia. 

Antojos, mareos, sueño, etc… todo esto ocurre en los 3 primeros meses del embarazo… en algunos casos no solo la mujer tiene, estos síntomas, también el hombre puede pasar por ellos. En mi caso no recuerdo haber tenido ningún antojo en particular, pero si tuve un síntoma que me duró todo el primer embarazo: tuve sueño, mucho sueño durante 9 meses. A pesar de que dormía y dormía bien, siempre tuve sensación de sueño. Y tu mamá, pues qué te diré, no hubo antojos exóticos, pero si le daba por comer cosas que regularmente no come tanto, como papas con chile y refrescos. 

Mareos, náuseas y malestar en general, en nuestro caso hubo poco, pero hay mujeres que lo pasan muy mal. Así que mi principal, por no decir mi única recomendación es pedirte que estés atento a lo que a ella se le pueda ofrecer.
En la mayoría de los casos, la primera persona que sospecha del embarazo es la mujer. Acto seguido procede a confirmar la sospecha para darle la sorpresa al marido. Algunas mujeres hacen de este anuncio todo un evento, y creo que tienen razón, pues no todos los días se da una noticia de esta naturaleza. Habrá sin duda mujeres que prefieran acudir al médico en pareja para recibir la noticia juntos y al mismo tiempo. Esto también es algo muy personal y cada quien lo resuelve como mejor le parece.

Cuando el embarazo se confirma la emoción suele ser mucha y existe una explosión de sentimientos encontrados, es probable que la pareja quiera festejar, pero caen en cuenta de que su idea de “festejo” quizá ya no es del todo compatible con la nueva condición de la mujer. 

A partir de este momento habrá cambios en la dinámica familiar y ambos tendrán que estar preparados para soportar cosas nuevas. Pero insisto, tu no tendrás que preocuparte mucho por el bebé, de él se va a encargar quien lo lleve en su vientre, tu tarea por todo el tiempo que dure el embarazo será cuidar a tu mujer.